Opinión Info Opinión

¿Qué tal una corte internacional de arbitraje marítimo “Made in Spain”?

Redacción ProfesionalesHoy18/05/2017

Por: Juan Díaz Cano, presidente de la Real Liga Naval Española

La historia de las instituciones en Europa se ha escrito a través de una lucha, no siempre soterrada, entre los planificados planteamientos ideológicos continentales y los planteamientos, siempre abiertos y pragmáticos, propuestos por el mundo sajón. Esta distinta cosmovisión diferenció a aquellas naciones que entendieron el mar como un fin en sí mismo y aquellas que lo entendieron como un simple medio. Naciones como Inglaterra apostaron por entender el mar como un fin, y bajo ideas como “primero la bandera y luego el comercio” consiguieron el control de los mares.

Fruto de ello, la Europa continental, siempre demasiado ensimismada en sus propias querencias internas, acabaría aceptando la superioridad marítima inglesa como un incuestionable dogma. Una vez aceptada esta pretendida superioridad, Inglaterra se permitió poder reescribir la historia marítima del mundo e imponer, por la vía de los hechos, las instituciones que en el futuro rigiesen al sector marítimo internacional.

Una de estas instituciones es la Corte Internacional de Arbitraje Marítimo sita, cómo no, en Londres. Es la capital británica el destino final de las disputas marítimas internacionales a la que se ven abocados la mayor parte de los armadores. Y lo hacen básicamente por dos motivos. El primero por la desesperante generalizada lentitud de la jurisdicción ordinaria, y el segundo por la especialización y probada imparcialidad que atesoran los árbitros británicos.

Si hay un negocio especialmente complejo de conocer ese no es otro que el marítimo. Exigir, por ejemplo, que los jueces mercantiles españoles sean capaces de digerir, en todos sus extremos, una póliza de fletamento al uso suena, hoy por hoy, a pura quimera. Baste recordar, en este sentido, el triste papel jugado por nuestra Justicia en el caso “Prestige” y la patética reclamación judicial en suelo norteamericano realizada por nuestro gobierno, con el resultado por todos conocido: 150 millones de euros en gastos judiciales a cargo del erario y una dura sentencia en contra. Sin embargo, en mitad de este aparente páramo podemos constatar el alto nivel profesional demostrado por los abogados maritimistas españoles, cuyos despachos nada tienen que envidiar a los más afamados despachos internacionales.

En función de todo lo expuesto, de la mano de la Real Liga Naval Española y de la Fundación Philippe Custeau, se anuncia el nacimiento del Instituto Internacional de Mediación y Arbitraje del Transporte, institución de la que derivarán una corte de mediación y otra corte de arbitraje, ambas con sede en Madrid. El proyecto basa su viabilidad en la constatada tradición marítima y la irreprochable historia que ambas instituciones promotoras atesoran. El instituto será una realidad en breve, y contará como árbitros y mediadores con los principales actores del derecho marítimo español, todos ellos encuadrados en un comité jurídico y un comité técnico.

La apuesta que supone esta iniciativa permitirá a los usuarios de estas cortes una notable reducción temporal de los procedimientos y un significativo ahorro de costes procesales. Sin duda, apoyar este proyecto supondrá para el sector asumir un papel protagonista por parte de nuestros navieros, agentes, transportistas, fletadores, etc en el ejercicio de su actividad.

Una vez constituidas estas cortes de mediación y arbitraje, sólo cabrá preguntarse si los actores del sector marítimo español apostarán por subir a este buque o si, por el contrario, seguirán anclados en el fatídico “que inventen ellos”. El tiempo lo dirá.

Suscríbase a nuestra Newsletter - Ver ejemplo

Contraseña

Marcar todos

Autorizo el envío de newsletters y avisos informativos personalizados de interempresas.net

Autorizo el envío de comunicaciones de terceros vía interempresas.net

He leído y acepto el Aviso Legal y la Política de Protección de Datos

Responsable: Interempresas Media, S.L.U. Finalidades: Suscripción a nuestra(s) newsletter(s). Gestión de cuenta de usuario. Envío de emails relacionados con la misma o relativos a intereses similares o asociados.Conservación: mientras dure la relación con Ud., o mientras sea necesario para llevar a cabo las finalidades especificadasCesión: Los datos pueden cederse a otras empresas del grupo por motivos de gestión interna.Derechos: Acceso, rectificación, oposición, supresión, portabilidad, limitación del tratatamiento y decisiones automatizadas: contacte con nuestro DPD. Si considera que el tratamiento no se ajusta a la normativa vigente, puede presentar reclamación ante la AEPD. Más información: Política de Protección de Datos