Los alumnos de la Comunidad de Madrid aprueban en eficiencia energética
La huella ecológica que dejarán las generaciones futuras está en juego. De ahí que el Programa de Educación Ambiental y Energética de BP y la ONG Reforesta, considerado como pionero en educación ambiental tras casi tres décadas de actividad, haya desarrollado un estudio entre los alumnos de la Comunidad de Madrid para evaluar sus hábitos energéticos a través de una calculadora de carbono, junto a otras actividades al aire libre para concienciar sobre la eficiencia en el uso de la energía.
Un total de 1.712 alumnos se han examinado a través de esta herramienta interactiva impulsada con el patrocinio de BP para conocer sus hábitos de consumo energético. Según los resultados obtenidos, el 80,7 % de los alumnos de la Comunidad de Madrid aprueban en eficiencia energética. De hecho, un 21 % de los alumnos obtuvieron sobresaliente, frente al 13 % que obtuvieron un suficiente.
Para calcular su huella de carbono, alumnos de la Comunidad de Madrid de colegios privados, públicos y concertados con edades comprendidas entre los 8 y los 18 años, han tenido que responder a cuestiones relacionadas con sus hábitos cotidianos en los ámbitos de reciclaje, uso de la electricidad, del agua y del transporte. Nueve preguntas sencillas sobre si dejan el ordenador encendido, van al colegio en coche o cómo gestionan los residuos.
Los escolares de 3º y 4º de Educación Primaria (8-10 años) destacan por haber obtenido una puntuación más alta: en esta etapa, un 26 % de los examinados obtuvieron un sobresaliente y solo un 14 % un insuficiente. En los niveles superiores (ESO y Bachillerato), tan solo un 14 % de alumnos que probaron la calculadora de carbono obtuvo un sobresaliente, frente al 23 % que suspendieron.
En el marco de su compromiso con la sostenibilidad ambiental, el programa patrocinado por BP desarrolla además actividades al aire libre en una jornada en La Pedriza (Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama – Madrid) y pone a disposición de profesores y alumnos ejercicios, cuadernos y la citada calculadora para reflexionar sobre eficiencia, ahorro energético y energías renovables entre los más jóvenes.
El objetivo fundamental de esta acción educativa impulsada por BP y Reforesta es fomentar el conocimiento de los mecanismos de ahorro y eficiencia energética que muestra la naturaleza y reflexionar sobre su aplicación en la vida diaria, con el fin de contribuir a la mitigación del cambio climático.
Análisis práctico en La Pedriza
La excursión a la Pedriza, una de las actividades con más éxito dentro del programa, se desarrolla durante una mañana entre los meses de febrero a junio y de octubre a diciembre, donde los alumnos observan las adaptaciones que las plantas y los animales han desarrollado para aprovechar eficientemente recursos esenciales, como la energía y el agua, y su aplicación eficiente a la vida cotidiana.
En concreto, educadores equipados con instrumentos de observación y medida, conducen a los escolares por una senda en la que pueden observar diferentes ambientes. Los alumnos descubren, entre otras cosas, los beneficios de las zonas cálidas y húmedas para la flora y la fauna.
Los alumnos se adentran así en el concepto de eficiencia y reflexionan sobre la importancia de usar eficientemente los recursos para contribuir a la sostenibilidad a través de la observación de lo que ocurre en la naturaleza y a través de las nuevas tecnologías como la calculadora de CO2.
El éxito del Programa de Educación Ambiental de BP y Reforesta se fundamenta en la participación de 1.386 centros escolares de la Comunidad de Madrid y un total de 147.500 alumnos desde el inicio del programa en 1993. De hecho, la ocupación es del 100 % y en todos los cursos existe lista de espera para participar. Es además la única acción de educación en el uso de la energía que se desarrolla en plena naturaleza.
