Miami, 5 nov (EFE).- Un tribunal de Miami autorizó este miércoles a la filial estadounidense de la empresa «100 Montaditos» acogerse al capítulo 11 de protección por bancarrota, lo que permitirá a la empresa española saldar las deudas pendientes con los proveedores y los franquiciados en Estados Unidos.
La decisión judicial fue confirmada a EFE por Rosa Madrid, directora general corporativa de Restalia, propietaria de «100 Montaditos».
«Se ha cerrado un capítulo y a partir de ahora la compañía deberá reorganizarse para coger fuerzas», dijo Rosa Madrid, miembro del Consejo de Administración de la compañía.
En marzo de 2015, el grupo Restalia, que opera en Estados Unidos bajo la matriz 100 M Holding, se presentó ante un juzgado de Miami para acogerse al «Chapter 11» (Capítulo 11) y declararse en bancarrota.
Desde entonces, según Rosa Madrid, 100 Montaditos «se ha comportado muy bien tanto para los clientes como para el mercado».
«La marca ha demostrado mucha fortaleza y ha seguido funcionando bien. Incluso durante todo el proceso judicial», señaló la directiva del grupo Restalia.
Según datos aportados por la empresa, la deuda pendiente era de entre ocho y nueve millones de dólares, de los cuales han tenido que depositar el 33 por ciento (algo mas de dos millones de dólares)ante el juzgado de Miami para saldar las cuentas pendientes «y cerrar el capítulo».
La responsable de Restalia puntualizó que la deuda que tenía la compañía española en Estados Unidos era únicamente con proveedores y franquiciados y que en ningún caso había deuda financiera con alguna entidad bancaria.
Junto a la matriz, otras empresas como 100 M Franchise, 100 M Operator, 100 M Lincoln y 9 de los restaurantes que la cadena tenía en Miami-Dade, Broward (Florida) y Arlington (Virginia), se acogieron a esta protección que ofrece la ley estadounidense.
Esta medida, también conocida como concurso de acreedores, permitía a la empresa seguir operando en Estados Unidos siempre y cuando se llegara a un acuerdo con los acreedores mientras se saneaban las finanzas de la empresa.
«El capítulo once nos ha ayudado, ha sido una herramienta para corregir algunos errores de gestión y para reorientar el crecimiento de la compañía», explicó Madrid.
En ese sentido, subrayó que la compañía va a seguir poniendo sus esfuerzos para expandirse tanto por Estados Unidos como por América Latina.
Por ello, manifestó que se debe «hacer una reflexión interna» para ver «en qué formato» y «cómo» van a crecer en los próximos años en la región.
«Podíamos haber cerrado, tirar la toalla y marcharnos. Pero elegimos seguir este camino, que requiere mucho más esfuerzo, y supone una apuesta por Norteamérica, desde el punto de vista de la marca», explicó Rosa Madrid.
Con todo, espera posicionar «la marca 100 Montaditos como una marca global», algo que, según ella, «no es fácil en el mundo de la restauración».
Por esa razón, indicó que la empresa española va a «seguir creciendo de forma muy prudente» con el objetivo de «seguir conquistando el mercado».
La directora general corporativa de Restalia explicó que 100 Montaditos «ha pagado el peaje de la internacionalización» y señaló «varios motivos» por los que el proyecto inicial fracasó.
«No hay un único motivo. Fue un conjunto de cosas que se podrían haber afrontado de otra forma. Hemos sabido reaccionar y salir de ahí», comentó al tiempo que aseguraba que «hemos aprendido mucho a cómo hacer las cosas y cómo no».
El directivo de Restalia Ignacio García Nieto se quedará en Miami al frente de la oficina de Estados Unidos y América Latina «con un equipo de operaciones, compras y marketing», que va a seguir trabajando en el desarrollo empresarial de la marca.
En Latinoamérica, también se ha reorganizado «la forma de gestión» de la compañía en países como México, Colombia, Guatemala, Chile o Panamá «donde la apuesta por esta parte del mundo es definitiva».
El grupo Restalia, que incluye la cadena de comida «100 Montaditos», «La Sureña» y «TGB -The Good Burger», tiene más de 500 tiendas repartidas por todo el mundo.
Rosa Madrid apostilló que, a pesar de esta situación en Estados Unidos, «la marca no se ha resentido» y «ha continuado creciendo» en todo el mundo.