Fráncfort (Alemania), 18 mar (EFE).- La Justicia alemana absolvió hoy al antiguo presidente de Porsche Wendelin Wiedeking y al exdirector de Finanzas Holger Härter, acusados de manipulación del mercado en un intento de hacerse con Volkswagen (VW) en 2008.
Tras 22 vistas judiciales, la Audiencia Provincial de Stuttgart rechazó las acusaciones de la Fiscalía de que ambos hubieran manipulado las acciones ocultando sus planes de hacerse con VW o informando insuficientemente de ellos.
«No hay nada de verdad en las acusaciones de la Fiscalía de Stuttgart, nada, ni delante, ni detrás, ni en medio», dijo el juez presidente del Tribunal, Frank Maurer, al final del proceso que comenzó a finales de octubre del año pasado.
La Fiscalía va a estudiar la posibilidad de interponer un recurso a la decisión judicial.
La Fiscalía había solicitado una pena de prisión de dos años y medio para Wiedeking y de dos años y tres meses para Härter, que habían rechazado en todo momento las acusaciones.
«Estamos contentos de que se haya cerrado este capítulo», dijo Wiedeking después de conocer la sentencia.
«Fuimos siempre conscientes de que no teníamos nada que reprocharnos», dijo Härter.
Porsche intentó en 2008 hacerse con Volkswagen, cuyas acciones multiplicaron su valor por cinco a finales de octubre de ese año en dos días, lo que pilló por sorpresa a los especuladores que habían apostado a que iban a bajar, ocasionándoles enormes pérdidas.
La Audiencia de Stuttgart también rechazó que Wiedeking y Härter quisieran manipular las acciones de VW en su propio beneficio y por ello Porsche SE no deberá pagar ninguna multa.
El fabricante de deportivos Porsche intentó hacerse con VW mediante transacciones financieras complejas, con las que iba aumentando su participación, pero al final fracasó al no encontrar la financiación necesaria tras el estallido de la crisis financiera y fue Volkswagen el que absorbió al fabricante de deportivos como una de las doce marcas que ahora tiene la compañía.
Se acusó a Wiedeking y Härter de no haber dado a los accionistas entre 2007 y 2009 información suficiente sobre los planes de hacerse con un 75 % de Volkswagen.
El juez añadió que «no había ningún plan secreto de la junta directiva de ir a por el 75 %» e hizo hincapié en que ningún testigo podía apoyar las acusaciones.
También consideró que las conclusiones a las que había llegado la Fiscalía no eran coherentes ni realistas, como por ejemplo la suposición de que Wiedeking y Härter tomaron la decisión de adquirir Volkswagen «tomando una cervecita al salir del trabajo».
Una decisión de ese tipo debería haber sido vinculante, según dijo Maurer.
La Fiscalía también había considerado inválidos algunos dictámenes periciales pero el Tribunal apreció que «los métodos de análisis eran sólidos».