Madrid, 16 jun (EFE).- Iberia, como todas las aerolÃneas internacionales, va a salir de la crisis del COVID-19 “más pequeña” en términos de flota y lo será en los próximos cinco años, porque el sector se encuentra ante “la mayor crisis de la historia” y el problema “no es temporal”, ha asegurado este martes su presidente ejecutivo, Luis Gallego.
Están en riesgo millones de empleos y “el tronco central del turismo en España, del que se benefician después todas las ramas del sector”. “Sin aviones no hay turismo y, sin turismo ni movilidad, peligra nuestro paÃs”, ha advertido en la cumbre empresarial organizada por la patronal CEOE.
LA PEOR CRISIS DE LA HISTORIA DE LA AVIACIÓN
Gallego ha señalado que estamos ante la peor crisis de la historia de la aviación, sin precedentes de algo parecido, mientras en otras anteriores, como la del SÃndrome Respiratorio Agudo Grave (SRAS), identificado en 2002, o los atentados terroristas de las Torres Gemelas, en Nueva York, el 11 de septiembre de 2001, la curva de caÃda y recuperación de la demanda fue en forma de V, en este caso, hemos pasado de una V a una U y ahora ya estamos en una L.
Además, las compañÃas tendrán que hacer frente a la devolución de los préstamos obtenidos durante la pandemia, lo que dificultará la recuperación.
Iberia operará en julio, en las rutas de corto y medio radio, un programa que será apenas una quinta parte de lo que habrÃa tenido en circunstancias normales, debido a la crisis del COVID-19, ha agregado.
En largo recorrido, el programa de la compañÃa, que centra su esfuerzo en recuperar la confianza de los clientes sobre la seguridad de los vuelos, también se ha reducido mucho y está condicionado a cómo evolucionen las restricciones, prohibiciones y cuarentenas.
Iberia entró en esta crisis “mejor” que muchos de sus competidores por la exigente transformación efectuada desde el año 2012, pero su duración ha hecho que el impacto “nos llegue a todos”, por lo que de nuevo está obligada a reinventarse.
Es el momento de afrontar medidas estructurales que apoyen al sector turÃstico y a las aerolÃneas como desbloquear la llegada del AVE a la terminal T4 del aeropuerto de Barajas, lo que aumentarÃa medio millón al año los pasajeros del hub madrileño, impulsar el cielo único europeo y reducir las tasas.
En su opinión, la competencia, tras la crisis, será aún más difÃcil, dado que aerolÃneas que ya estaban sin un futuro viable antes de la pandemia “están siendo rescatadas con ayudas difÃcilmente justificables”.
PLAN RENOVE PARA LA AVIACIÓN EUROPEA
Ha abogado por un Plan Renove para la aviación europea, donde el Gobierno español “tiene una oportunidad de oro para liderarlo”, para ayudar a las aerolÃneas a salir de la crisis y contribuir a una industria más sostenible.
Las aerolÃneas no van a poder afrontar la renovación de flota encaminada a una mayor sostenibilidad, ya que, con aviones viejos a precios muy baratos y el precio del fuel en mÃnimos históricos, la inversión en aparatos de tecnologÃa limpia “se hace muy cuesta arriba con las enormes pérdidas causadas por el COVID-19”, ha alertado.
Según el presidente de Iberia, si la Unión Europea (UE) desarrolla un Plan Renove que permita bonificar el reemplazo de aviones viejos o de tecnologÃa sucia con los de nueva generación, esa ayuda tendrÃa un efecto multiplicador.
Por un lado, permitirÃa reducir las emisiones de CO2 (aproximadamente un 30 % en la flota de largo recorrido de Iberia y de un 15 % en el caso de la de corto), lo que tendrÃa siempre un valor muy superior que el importe de la ayuda recibida.
En segundo lugar, al poder afrontar la compra del avión nuevo, el dinero fluye a lo largo del ecosistema aeronáutico, generando beneficios que redundan en impuestos para los gobiernos, como el español, reforzando el I+D+I y creando decenas de miles de puestos de trabajo, ha precisado.