Madrid, 14 jul (EFE).- La compañÃa energética EnergÃas de Portugal (EDP) anticipará el cierre de sus centrales de carbón en Portugal y España a 2021 y 2022, en lÃnea con su estrategia de descarbonización, ha informado la compañÃa en un comunicado.

En el caso de la central de Sines (Portugal), ya ha entregado a la Dirección General de EnergÃa y GeologÃa del paÃs su declaración de renuncia a la licencia de producción para que pueda concluir su actividad en enero de 2021.
Para las de España, solicitará en las próximas fechas el cierre de Soto 3; respecto de Aboño 1, la compañÃa continúa con su proceso de transformación para la quema de gases siderúrgicos para 2022 y Aboño 2 se mantendrá como apoyo a cualquier indisponibilidad.
En su nota, EDP destaca que la decisión se adopta en un contexto en el que la producción de energÃa depende cada vez más de fuentes renovables, y con el incremento constante de los costes de producción con carbón y la mayor competitividad del precio del gas natural y las centrales de ciclo combinado, las perspectivas de viabilidad de las centrales de carbón han disminuido de forma drástica.
Soto 3 no produce energÃa desde hace más de un año, y Sines, con 1180 MW de potencia, está parada desde el 25 de enero, tras un año en el que la generación de energÃa eléctrica con carbón cayó a mÃnimos históricos, añade el comunicado.
En Sines, EDP está validando el desarrollo de un proyecto de producción de hidrógeno verde, en consorcio con otras empresas; también solicitará el cierre del grupo 3 de la Central de Soto de Ribera (con 346 MW de potencia), donde está validando proyectos con el objetivo de desarrollar un proyecto innovador de almacenamiento de energÃa.
En diciembre del pasado año anunció que habÃa pedido la licencia para la transformación de su grupo 1 (342 MW de potencia) en una central que utilice sólo gases siderúrgicos a partir de 2022.
Los cambios en las centrales de Aboño y Soto no supondrán pérdida de empleo, señala la empresa.