Nueva York, 15 nov (EFE).- La compañía de servicios financieros PNC, una de las más grandes de Estados Unidos, está en conversaciones avanzadas para adquirir la división estadounidense del banco español BBVA, lo que supondría una de las mayores uniones de entidades bancarias desde la crisis financiera de 2008, informó este domingo el Wall Street Journal.
La transacción, que podría alcanzar un valor de 10.000 millones de dólares, desembocaría en la creación del quinto banco comercial más grande de EE.UU., con más de 550.000 millones de dólares en activos y sucursales que recorren toda la mitad este del país.
El BBVA, que en 2007 compró la compañía con base en Alabama Compass Bancshares, tiene más de 600 sucursales y unos activos de unos 100.000 millones de dólares en EE.UU.
Según la información obtenida por el Wall Street Journal, que no concretó su fuente, las compañías están concretando los pormenores del acuerdo, que podrían ser anunciado este lunes, 16 de noviembre.
PNC, que tiene un valor de mercado de unos 50.000 millones de dólares, aumentó sus fondos de financiación este año cuando vendió sus participaciones en la compañía de inversiones BlackRock por 15.000 millones de dólares.
La compra de BBVA en EE.UU. ayudaría a PNC, con sede en Pittsburgh, a expandir su negocio de banca tanto comercial como empresarial, mientras que el cierre de sucursales en la zona sureste del país, donde las entidades poseen una red de oficinas que se solapa, podría llevar a una reducción de costes, apunta el diario neoyorquino.
Las noticias del posible acuerdo se producen dos meses después de que el director ejecutivo de PNC, William Demchak, asegurara el pasado septiembre que la presencia nacional del banco sería el «primer, segundo y tercer objetivo» de cualquier acuerdo.
Las adquisiciones de grandes bancos han escaseado desde la crisis de 2008, con pocos actores dispuestos a poner a prueba el clima político del país, que además se han mostrado precavidos ante la aplicación de nuevas regulaciones sobre los grandes bancos.
A ello se une que la antigua motivación de añadir sucursales tiene menos peso en la actualidad dado que muchas de las actividades bancarias ahora suceden en internet y los clientes tienen menos ataduras con las oficinas físicas de los bancos.
Sin embargo, las entidades regionales se han visto presionadas por los beneficios que han estado registrando grandes bancos nacionales como JP Morgan Chase o Bank of America, que han estado atrayendo a la clientela con nuevas aplicaciones móviles y extensas redes de sucursales.
El acuerdo supondría la retirada de EE.UU. de BBVA, el segundo banco más grande de España y con una importante presencia en América Latina.
En 2007, BBVA compró Compass por 10.000 millones de dólares para consolidar su presencia en EE.UU, pero desde entonces ha rebajado el valor de su negocio en dos ocasiones y este año advirtió de otro posible descenso por el importante golpe del coronavirus a la economía del país.