“La acuicultura es un sector innovador y orientado a la ciencia en sí mismo, su futuro desarrollo podrá traer más formas de cosechar mejor y más sostenibles fuentes de alimentos para el consumo humano directo”
Com el objetivo de poner fin al hambre, la FAO se crea para lograr la seguridad alimentaria para todos, y al mismo tiempo garantizar el acceso regular a alimentos suficientes y de buena calidad para llevar una vida activa y sana. Em este sentido, la acuicultura juega un papel fundamental como parte del desarrollo social, económico e industrial de la sociedad. Rodrigo Roubach, PhD, Senior Aquaculture Officer (Aquatic Animal Nutrition), de la FAO, nos habla de la importância de esta actividad y de su repercusión em la indústria marítima.
¿En qué consiste exactamente la acuicultura?, ¿qué beneficios principales aporta a la sociedad?
La acuicultura es el cultivo de organismos acuáticos: peces, moluscos, crustáceos, plantas acuáticas, cocodrilos, caimanes, tortugas y anfibios. La acuicultura implica alguna forma de intervención en el proceso de crianza para mejorar la producción, como el almacenamiento regular, la alimentación, la protección de los depredadores, etc. La acuicultura también implica la propiedad individual o corporativa de la población que se cultiva. A efectos estadísticos, los organismos acuáticos que son cosechados por una persona física o jurídica que los haya poseído durante su período de cría contribuyen a la acuicultura, mientras que los organismos acuáticos explotables por el público como recurso de propiedad común, con o sin licencias apropiadas, son cosecha de pesquerías de captura. La acuicultura también se practica en diferentes entornos:
– Cultivos de agua dulce, como embalses, ríos, lagos, canales y aguas subterráneas, en los que la salinidad normalmente no supera los 0,5 ‰ (5 ppm).
– Cultivos de aguas salobres, como estuarios, calas, bahías, lagunas y fiordos, en los que la salinidad puede estar o fluctuar entre 0,5 ‰ y agua de mar de intensidad completa.
– La maricultura, que tiene lugar en el agua de mar, como los fiordos, las aguas costeras y abiertas y los mares interiores en los que la salinidad generalmente supera los 20 ‰.
Alrededor de 598 especies acuáticas se cultivan actualmente en todo el mundo, lo que representa una gran cantidad de diversidad genética tanto dentro como entre especies. La acuicultura es practicada tanto por algunos de los agricultores más pobres de los países en desarrollo, como por las compañías multinacionales. Comer pescado es parte de la tradición cultural de muchas personas y, en términos de beneficios para la salud, tiene un excelente perfil nutricional. Es una buena fuente de proteínas, ácidos grasos, vitaminas, minerales y micronutrientes esenciales.
De una producción mundial total de peces (2016) de 171 millones de toneladas, y considerando que la producción humana consumida es de 151,2 millones de toneladas, la acuicultura ahora contribuye con 80 millones de toneladas, es decir, alrededor del 52,9% de los peces comestibles, lo cual supone un beneficio claro y directo a la sociedad, ya que puede llenar la importante brecha alimentaria para el consumo humano.
La producción mundial de la acuicultura (2016), incluidas las plantas acuáticas, ascendió a 110,2 millones de toneladas, estimadas en un valor de primera venta de 243.500 millones de USD. La producción total incluía 80,0 millones de toneladas de peces comestibles (231.600 millones de USD) y 30,1 millones de toneladas de plantas acuáticas (11.700 millones de USD), así como 37.900 toneladas de productos no alimentarios (214,6 millones de USD).
Casi 60 millones de personas (el 14 por ciento de ellas son mujeres) de todo el mundo, trabajan directamente en el sector de la pesca y la acuicultura, cuyo primer valor de producción de venta en 2016 sumó $ 362 mil millones. Los peces representan alrededor del 17 por ciento de las proteínas animales consumidas por la población mundial y, en general, proporcionan a aproximadamente 3,2 billones de personas en el planeta con casi el 20 por ciento de su proteína animal. El pescado representa un alimento altamente nutritivo, mucho más que una fuente de proteína, especialmente útil para contrarrestar las deficiencias de micronutrientes. Proporcionan micronutrientes esenciales (vitaminas y minerales) y ácidos grasos omega-3, que son necesarios para poner fin a la desnutrición y reducir la carga de enfermedades transmisibles y no transmisibles en todo el mundo. El crecimiento de la acuicultura ha proporcionado y ha demostrado ser un importante sistema de producción de alimentos, capaz de contribuir a la seguridad alimentaria y nutricional en todo el mundo.
Las plantas acuáticas como las algas son también un recurso importante para la acuicultura, ya que proporcionan nutrición, medios de vida y otros usos industriales importantes.
El ochenta por ciento de la producción acuícola actual proviene de animales del eslabón bajo de la cadena alimentaria, como peces y moluscos herbívoros y omnívoros. Con base en su desempeño dinámico en los últimos 30 años, y con las capturas estables de la pesca de captura, es probable que el futuro crecimiento del sector pesquero provenga principalmente de la acuicultura.
Entre los muchos beneficios que la acuicultura proporciona a la sociedad y uno de sus principales impulsores como sector productor de alimentos, está el ejemplo de los países asiáticos sobre la combinación de producción de arroz y acuicultura, donde algunas de las prácticas empleadas hoy en día han demostrado aumentar la productividad, produciendo más con menos, para ayudar a satisfacer la demanda de una población mundial creciente y cada vez más urbanizada.
¿Consideran que hay cierta desinformación sobre esta actividad y sus beneficios?
Desafortunadamente sí, dado que el mundo de la información se ha vuelto más complejo y diverso, y presenta una gran cantidad de información técnica fácilmente disponible sobre varios temas, incluso sobre aspectos técnicos de la acuicultura y los sistemas potenciales, aún existe cierta información que no está fundamentada científicamente, con lo que se podrían dañar a aquellos que solo dependen de este tipo de información, así como en proporcionar información engañosa sobre el sector.
¿Qué oportunidades representa la acuicultura en el segmento pesquero?
Además de la integración actual del sector dentro de las especies acuícolas basadas en la pesca, es decir, los salmónidos en América del Norte, y las especies acuícolas basadas en la pesca, es decir, el engorde de atún en el océano Pacífico, las perspectivas futuras brindan muchas oportunidades a quienes dependen de ellos para su alimentación o medios de subsistencia de las aguas continentales u océanos, a medida que se amplían los conocimientos técnicos y la capacitación en capacidad puede traer más eficiencia de producción e integración de la acuicultura dentro del sector de la agroecología.
La acuicultura es un sector innovador y orientado a la ciencia en sí mismo, su futuro desarrollo podrá traer más formas de cosechar mejor y más sostenibles fuentes de alimentos para el consumo humano directo. En particular, cuando consideramos la gran cantidad de oportunidades que todavía no se han explorado para utilizar organismos de cadena de alimentación inferior (fitoplancton y zooplancton) con el fin de proporcionar nuevos alimentos o material de alimentación para el segmento de la acuicultura.
Actualmente en España, ¿cuál es el grado de implantación y desarrollo de la acuicultura?
España dispone de una variada disponibilidad de recursos hídricos sobre los que es posible la realización de acuicultura, tanto en el ámbito marino como el continental (aguas dulces). Así, a los casi 8.000 km de costa se suman nueve grandes ríos, numerosos cursos fluviales, lagos y una capacidad de agua embalsada superior a los 55.000 hm3, además de una orografía y diversidad de climas que proporcionan características ambientales y fisicoquímicas idóneas para el desarrollo de la acuicultura. Los establecimientos de acuicultura están diseñados y construidos para satisfacer las necesidades de las especies producidas y adaptarse a las condiciones del medio físico. De esta manera, puede hacerse la siguiente categorización de los establecimientos acuícolas en España: En el mar en viveros (jaulas); En el mar en bateas y long-lines; En tierra firme (agua salada); En playa, zona intermareal y esteros (agua salada); En tierra firme (agua dulce).
España, por su tradición con el consumo y la producción de productos del mar, que ocuparon una posición destacada a nivel mundial en producción de productos acuáticos en los años 60 basada en la pesca extractiva y, sobre todo, en aguas de terceros países, pero sufrió una disminución progresiva debido a la reducción de posibilidades de pesca en los años 70. La acuicultura, que en España comenzó en los años 60, a pesar del aumento progresivo en su peso específico y las expectativas generadas, no ha podido compensar la caída de la actividad pesquera o contrarrestar la disminución de las capturas. Aunque existe una amplia posibilidad para el crecimiento del sector de la acuicultura, una de sus principales limitaciones sigue siendo la disponibilidad de espacio, ya que la competencia de otras actividades, en particular en los entornos costeros, es fuerte.
Para 2016 las cifras de la cosecha de acuicultura en España fueron de un total de 283.828 toneladas y el valor en primera venta de 560,6 millones de USD. Descompuesto en mejillón (215,855 t), lubina (22,956 t), trucha arcoiris (17,354 t) y dorada (12,397 t) como especie principal. De esta forma, coloca a España en el tercer lugar en comparación con la producción europea.
¿Qué especies son las más proclives para la acuicultura española?
El mejillón (Mytilus spp.), con 215.855 toneladas recolectadas en 2016, fue el principal recurso acuático vivo en España en términos de peso. En este sentido, uno de los principales candidatos para la expansión.
¿Puede llegar la acuicultura a paliar ciertos problemas surgidos en el mundo pesquero como el de la pesca ilegal o el límite de cuotas en ciertas especies?
Sí, en el sentido de que ciertas especies que no son capaces de abastecer el mercado a través de prácticas pesqueras tradicionales, más allá de sus cuotas sostenibles, y tienen la tecnología para ser producida a través de la acuicultura podrían aliviar algunos de estos problemas.
Actualmente se habla de acuicultura sostenible, ¿en qué consiste esta práctica?
Una estrategia acuícola sostenible necesita:
- un reconocimiento del hecho de que los agricultores obtienen una recompensa justa de la agricultura para asegurar que los beneficios y los costos se compartan equitativamente;
- promover riqueza y creación de empleo;
- para asegurarse de que haya suficiente comida accesible para todos;
- gestionar el entorno en beneficio de las generaciones futuras;
- asegurar que el desarrollo de la acuicultura sea ordenado, con autoridades e industria bien organizadas;
La máxima aspiración es que la acuicultura desarrolle todo su potencial para que:
- las comunidades prosperan y las personas son más saludables;
- hay más oportunidades para mejorar los medios de vida, con mayores ingresos y una mejor nutrición;
- los acuicultores (agricultores) y las mujeres tienen poder.
¿Qué papel ocupa la I+D+i en el desarrollo de esta actividad?
Tanto la pesca como la acuicultura son actividades impulsadas por la ciencia, ya que ambas dependen de la información científica para aumentar su capacidad y mejorar su sostenibilidad. Además, esto se percibe fácilmente cuando rastreamos el crecimiento y la diversificación que ha experimentado el sector de la acuicultura en los últimos 50 años en todo el mundo. No solo en la perspectiva de la creciente eficiencia de diferentes especies de peces se ha obtenido debido al trabajo diligente del sector científico hacia técnicas de cría mejoradas, mejores alimentos, resistencia a enfermedades, nuevos materiales empleados, etc. En este sentido, deberíamos esperar que el sector aún podría beneficiarse a nivel mundial a medida que se aplica más investigación y ampliar su conocimiento hacia formas más innovadoras, productivas y sostenibles de producir peces y otros organismos acuáticos para el consumo humano.
Desde la FAO, ¿qué acciones están en marcha para el fomento y conocimiento de esta práctica?
Durante más de 70 años, la FAO ha estado trabajando en su mandato principal de eliminar el hambre, la inseguridad alimentaria y la malnutrición, reducir la pobreza rural y hacer que la agricultura, la silvicultura y la pesca sean más productivas y sostenibles. El mandato de la FAO fue reforzado en 2015 por los Objetivos de Desarrollo Sostenible con su destacado compromiso de acabar con la pobreza y el hambre en el centro de la Agenda 2030.
Las áreas de trabajo de la FAO incluyen:
- Promueve el desarrollo sostenible de la acuicultura, especialmente en los países en desarrollo, a través de un mejor desempeño ambiental del sector, a través de la gestión de la salud;
- Proporciona análisis e informes periódicos sobre el estado del desarrollo de la acuicultura y las tendencias a nivel mundial y regional, compartiendo conocimientos e información;
- Desarrolla e implementa políticas y marcos jurídicos eficientes que promueven el desarrollo sostenible y equitativo de la acuicultura con beneficios socioeconómicos mejorados;
- Proporciona asistencia técnica en apoyo a un desarrollo de la acuicultura respetando los principios contenidos en el Código de Conducta para la Pesca responsable;
- Desarrolla revisiones regionales del desarrollo, el estado y las tendencias de la acuicultura;
- Proyectos regionales y nacionales para ayudar a los países a establecer o fortalecer leyes, políticas y estrategias.
La alimentación y la agricultura son los elementos fundamentales para lograr los objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y muchos de ellos están directamente relacionados con la pesca y la acuicultura, en especial el ODS 14 (Conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible).
¿Cómo se vislumbra el futuro de la acuicultura?
La acuicultura tiene el potencial de abordar la brecha entre la oferta y la demanda de alimentos acuáticos y ayudar a los países a alcanzar sus objetivos económicos, sociales y ambientales. Sin embargo, la capacidad de la acuicultura para satisfacer la futura demanda de alimentos dependerá en gran medida de la disponibilidad de espacio en sitios adecuados. La planificación espacial de la acuicultura, integrada con la planificación por áreas, es fundamental para la gestión integrada de la tierra, el agua y otros recursos y para permitir el desarrollo sostenible de la acuicultura de una manera que se adapte a las necesidades de los sectores económicos en competencia, minimice los conflictos e integre y objetivos ambientales. El enfoque ecosistémico de la FAO para la acuicultura y el crecimiento azul son marcos útiles desarrollados en este contexto.
Aunque la discusión sobre la disponibilidad y el uso de ingredientes de alimentos acuícolas a menudo se enfoca en la harina de pescado y los recursos de aceite de pescado (incluyendo pescado / pescado de poco valor), considerando las tendencias pasadas y las predicciones actuales, es más probable que la sostenibilidad del sector acuícola esté estrechamente relacionada con el suministro sostenido de proteínas terrestres y animales terrestres, aceites y fuentes de carbohidratos para alimentos acuícolas. En particular, hacia una mejor eficiencia en el uso de los materiales procesados de la industria de piensos y su participación que puede destinarse al sector de la acuicultura. Por lo tanto, el sector de la acuicultura debería esforzarse por garantizar suministros sostenibles de ingredientes terrestres y de piensos vegetales.
Referencias:
Asociación Empresarial de Acuicultura de España / Apromar http://www.apromar.es/
El estado mundial de la pesca y la acuicultura 2018. Cumplir los objetivos de desarrollo sostenible. http://www.fao.org/documents/card/en/c/I9540ES
El estado mundial de la pesca y la acuicultura 2018. Versión resumida. Cumplir los objetivos de desarrollo sostenible. http://www.fao.org/3/CA0190es/CA0190es.pdf
FAO Fisheries Statistics 2018 http://www.fao.org/fishery/static/Yearbook/YB2016_USBcard/root/aquaculture/c1.pdf
FAO & World Bank. 2015. Aquaculture zoning, site selection and area management under the ecosystem approach to aquaculture. Policy brief. Rome
