El presidente Sánchez afirma que apoya a la industria electrointensiva

El presidente Sánchez afirma que apoya a la industria electrointensiva al defender la política industrial de su gobierno durante un acto celebrado este martes. El presidente del Gobierno ha defendido ha querido dejar claro que dicha política dota al sector de «seguridad y certidumbre respecto al precio de la energía», con herramientas como el estatuto para la industria electrointensiva, las compensaciones de costes indirectos por la emisión de CO2 y el Fondo Español de Reserva para Garantías de Entidades Electrointensivas.

A este respecto, se ha mostrado convencido de que medidas como la movilización de 470 millones de euros en apoyo a la industria electointensiva hasta 2022 van a contribuir a equiparar las medidas adoptadas por otros competidores en Europa. El presidente también ha garantizado que el Gobierno seguirá defendiendo en el seno de la Unión Europea la implantación de un mecanismo de ajuste en frontera por emisiones de CO2 para productos importados de terceros países para mejorar la competitividad de la industria europea, un asunto que estará en la mesa de los consejos europeos de los próximos meses.

Para Sánchez, toda la batería de medidas adoptadas desde el Gobierno de España, sumada «al extraordinario empuje de los fondos europeos», ofrece «un horizonte de renovación, esperanza y prosperidad para la industria asturiana y española que no debemos desaprovechar», en un momento de «incipiente recuperación económica» gracias también al avance de la campaña de vacunación contra la Covid, ha recordado.

Colaboración público-privada
Pedro Sánchez también ha defendido la necesidad de reforzar la colaboración público-privada en el proceso de transformación de la economía española hacia un nuevo modelo «ecológico y digital», que sea además más «cohesionado e inclusivo».

La intervención de Pedro Sánchez ha tenido lugar en el acto de presentación de ArcelorMittal donde los máximos responsables mundiales de la compañía han expuesto sus planes para invertir 1.000 millones de euros, en tecnologías para la descarbonización, en la factoría que la siderúrgica tiene en Gijón y de la acería de Sestao, que se convertirá en la primera del mundo en conseguir cero emisiones de carbono.

Para Sánchez se trata de «una buena lección» de que «juntos somos más fuertes y capaces de construir futuro» y por ello ha animado a seguir trabajando en la colaboración público-privada ante «la ocasión histórica e inmejorable» que van a representar los fondos europeos y los planes de recuperación para adaptar el tejido productivo al siglo XXI y lograr una economía «digital, sostenible y resiliente» que además contribuya a la vertebración territorial.

«Solo desde los máximos niveles de acuerdo, dialogo e implicación de todos los colectivos podremos abordar con éxito la modernización» de la economía, ha afirmado Sánchez, quien ha insistido en que, tras una crisis sanitaria, económica y social, las administraciones deben trabajar en alianza público-privada para fortalecer la industria y acompañar al sector en el «difícil tránsito» que representa su transformación de procesos.

El presidente, que ha garantizado que empresas y gobiernos están comprometidos con la industria del acero y, por tanto, en la recuperación y modernización económica, ha dicho que proyectos como el de ArcelorMittal, que podrían parecer «ciencia-ficción» hace solo unos años, representan una «respuesta presente y futura» para la industria puesto, que son «un paso fundamental» en el camino hacia la reducción de emisiones y la electrificación del proceso siderúrgico. Este «proyecto formidable» supone «una anticipación» hacia la decabonización, «sin perder sino aumentando» el peso industrial y creando «una nueva cadena de valor con un altísimo componente tecnológico», ha celebrado Sánchez, quien ha añadido que además contribuirá a crear puestos de alta cualificación y a convertir a Asturias en un «polo mundial de un crecimiento sostenible e integrador» que ofrece un «futuro esperanzador» para las nuevas generaciones.

Sánchez ha defendido el sector siderúrgico como «catalizador de muchos otros» y por ello ha incidido en la necesidad de avanzar hacia una producción de «acero cada vez más verde», lo que contribuirá a la consecución de los compromisos de sostenibilidad asumidos por España.

El presidente del Gobierno ha incidido en que España va a contar ahora con «herramientas muy poderosas» de la mano de los fondos europeos y los programas de recuperación, así como de las estrategias en ámbitos como la industria, el hidrógeno verde, la economía circular y la movilidad sostenible, para impulsar la «revolución ecológica y digital».